viernes, 26 de febrero de 2021

Morir, Soñar, Vivir

Cuando llegó el momento de vivir,

sentí que solo quería morir.

Así que me puse a dormir,

para no tener que vivir.


Pero dormir me permitió soñar.

El  anhelo de capturar los sueños

que soñaba entredormido

despertaron mis ganas de dibujar,

y los dibujos que soñaba despierto

encendieron mis ganas de escribir.


Y al darme cuenta de que tenía

tanto que soñar, 

tanto que dibujar,

tanto que escribir,

me di cuenta

de que tenía toda una vida 

que vivir antes de morir. 


1 comentario:

Miguel Castro Prado dijo...

Bello!! Me llega al alma y a las penas, gracias, de nuevo!!!